Patio de la Abadía desde la torre de la iglesia. |
QUIETUD TRANSFIGURADA
Suena la fuente, soledad sonora,
insípida esmeralda melodía.
Una paloma ronca. El mediodía
va tornándose en fuego a cada hora.
Plomizo el cielo, verde azul otrora,
cae como losa astral en la Abadía,
mientras llega un rumor de letanía,
que invita a la oración: pro nobis ora.
Fuente, paloma, sol, sonido, calma,
oraciones al viento, sueño y alma,
seráfica quietud transfigurada,
que se eleva serena hacia la altura
en donde a Dios contempla sin hartura,
sintiéndose del tiempo abandonada.