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DENSA NIEBLA
Densa
niebla se instala en mi ventana,
de
oscura soledad casi infinita,
borrando
el horizonte con cainita
intención
de ocultarme la mañana.
Pero en mi corazón brilla lozana
la
llama del Espíritu, que habita
muy
dentro de mi ser y me suscita
seguridad
sin fin, serena y sana.
Yo
sé que tras la noche viene el día,
que
todo lo esclarece, tan certero,
y
el astro rey me mostrará el sendero
por
donde, en larga y lenta travesía,
llegaré
hasta la meta verdadera
en
donde Dios a todos nos espera.
[05.06.18]
