POEMA DE ADVIENTO
Se viste el horizonte de esperanza,
que la espera presagia bienvenida.
El Señor está cerca y redimida
la humanidad será ya sin tardanza.
Su estrella se perfila en lontananza.
Nazaret ya presiente la partida
de María y José, viaje de ida,
para Belén en rápida mudanza.
En el camino acompañarles quiero
para así estar de todos el primero
junto el pesebre cuando nazca el Niño,
y una nana cantarle con cariño.
Allí me quedaré con alegría
toda la navidad, de noche y día.