IN MEMORIAM.
RECUERDO DE UN AMIGO Y COMPAÑERO
Hoy quiero recordarte, viejo amigo,
-Jesús Blanco-, exquisito compañero,
prolífico maestro, pregonero
del Evangelio y del Señor testigo.
Tu verbo dirigió, sin desabrigo,
por caminos de fe, que tú primero
habías recorrido tan certero,
al pueblo fiel que caminó contigo.
Tu música resuena melodiosa
cual bálsamo divino en la Abadía,
donde creciste en sabia compañía.
Ya que tu alma junto a Dios reposa,
descansa en paz por fin, y no te olvides
de aquel que sigue aún en estas lides.
(14.01.17)
[Imagen: Periodista Digital] |